Playas
Situada entre las playas de la Nova Icària y la de la Mar Bella, es el resultado, como sus vecinas, de un urbanismo que, con el empujón de la Barcelona olímpica del 92, quiso apostar por la apertura al mar: por la plena integración de las playas con los espacios verdes, los jardines y los barrios del entorno.
Esta playa está ligada de modo indisociable al barrio del mismo nombre, la Barceloneta, el barrio más marinero de Barcelona, donde los barceloneses acostumbran a degustar platos de pescado, marisco y tapas.
El público más joven tiene especial predilección por esta playa, que acoge un espacio dedicado al naturismo. Es un punto de encuentro de un público diverso y cosmopolita, de gente deportiva y de estudiantes de las facultades cercanas.
Es la playa contigua al Port Olímpic por levante y tiene como trasfondo el pez metálico diseñado por el arquitecto Frank Gehry. Esta playa se creó con la urbanización de la Vila Olímpica, a finales de los años ochenta del siglo pasado, cuando Barcelona apostó decididamente por crear un litoral accesible y abierto a la ciudad.
Como la vecina Mar Bella, esta playa es fruto de la renovación urbanística del litoral que se realizó con motivo de los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992. Sus usuarios son mayoritariamente vecinos del barrio y está considerada como una de las más tranquilas de la ciudad.