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Muchas de las antiguas fábricas de Barcelona han sido remodeladas para acoger nuevas actividades. Can Ricart y Can Felipa son un gran ejemplo de patrimonio industrial de Poblenou, que ha sido adaptado para un nuevo uso más acorde a los tiempos actuales.
La antigua fábrica de Can Ricart es un referente histórico de la industrialización en Barcelona. Se construyó entre los años 1852 y 1855 y fue una de las primeras fábricas de estampación mecánica de algodón de Catalunya.
Can Ricart ocupaba el espacio equivalente a cuatro islas del Eixample. De sus edificios industriales de arquitectura fabril todavía se conservan: la nave principal, la torre adosada y una nave que se utiliza como espacio de creación artística. Destacan de forma majestuosa en Poblenou, al lado del Eix Pere IV.
Al acercarnos a Can Felipa, en la calle Pallars, nos cautivará la belleza de este edificio con mansardas y grandes ventanales en su fachada. Puede parecer un bloque de viviendas parisino, sin embargo, fue una antigua fábrica textil de 1855.
En la actualidad, Can Felipa acoge el Archivo Histórico de Poblenou, un teatro en el desván y un Centro Cívico, que ofrece una gran variedad de actividades pluridisciplinares.
